La última asamblea de la Vocalía de Atención Primaria Rural del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) contó con la participación del nuevo presidente de la corporación, el Dr. Tomás Cobo Castro, quien abordó, de manera concreta, la importancia de trabajar en la Formación Médica Continuada.
En esta primera toma de contacto del Dr. Cobo con los representantes del CGCOM en el ámbito de la Medicina Rural, explicó su cercanía a la Atención Primaria Rural desde su experiencia como Anestesista en la Unidad del Dolor en el Centro de Salud de Potes, Cantabria, el entorno rural donde está el monumento en homenaje al médico de Atención Primaria Rural. El presidente del CGCOM expuso su apuesta por defender las necesidades de la especialidad de Atención Primaria y su voluntad de luchar contra las carencias vigentes en este ámbito asistencial, en general, y en el entorno rural, en particular.
Por otra parte, el Dr. Hermenegildo Marcos abordó la situación de la formación de la Atención Primaria en la Universidad y expuso la reciente encuesta de la Confederación Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM) sobre este tema, e informó de la reunión del Foro de la Atención Primaria con la Conferencia de Decanos haciendo hincapié en la presencia de la Atención Primaria entre los departamentos de la Universidad y la necesidad de presencia de Médicos de Atención Primaria en las Universidades.
El Dr. Hermenegildo Marcos, representante nacional de Atención Primaria Rural del Consejo General Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), analiza en este artículo de opinión, del Blog AP25, la situación de la Atención Primaria en España.
Dr. Hermenegildo Marcos, representante nacional de Atención Primaria Rural del Consejo General Colegios Oficiales de Médicos
Supongamos, por ejemplo, que viajamos hasta el cráter del volcán Nyragongo, en la República Democrática del Congo, en pleno ecuador de la tierra. En una noche estrellada hemos perdido la referencia de la Estrella Polar y apenas alcanzamos a ver la Cruz de Sur. Esta es la sensación que tengo cuando miro 5 años atrás a marzo de 2016, cuando comenzamos AP25 e intento vislumbrar, en plena pandemia por la Covid-19, como será nuestro ejercicio de la medicina de AP dentro de unos 5 años, a finales de 2025, con escasos y difusos puntos de referencia.
Cráter del volcán Nyiragongo, en la República Democrática del Congo
Durante estos años hemos recorrido un camino fructífero y esperanzador, hemos elaborado un texto de reflexión, abierto y en actualización permanente, publicamos de forma periódica un blog donde exponemos nuestro punto de vista y analizamos nuestra situación actual, hemos creado un foro de encuentro con las “Jornadas AP25” donde han participado voces importantes en el ámbito sanitario y, por último, hemos llevado nuestra voz a los principales partidos políticos, consejerías de salud, ayuntamientos y al Congreso de los Diputados.
El Dr. Vicente Matas, representante nacional de Atención Primaria Urbana, explica en esta entrevista de balence de un año marcado por la COVID19 que “es fundamental que en Atención Primaria exista un presupuesto finalista suficiente y es urgente que se dedique, lo antes posible, más del 20% del presupuesto sanitario público, como se hacía en los años ochenta”.
¿Cómo ha vivido la pandemia como ciudadano y como médico?
Con mucha preocupación y tomando todas las medidas preventivas posibles, en la primera ola cuando faltaba material de todo tipo, tratando de apoyar a los compañeros, buscando material de protección, colaborando con los grupos de ciudadanos voluntarios que hicieron una gran labor confeccionando mascarillas, pantallas protectoras, batas de plástico, protectores de orejas para las mascarillas, patucos… y todo lo que se podía hacer. El mercado quedó desabastecido y los sanitarios, entre ellos los médicos, se enfrentaban a la pandemia en condiciones muy precarias, con muy poco material, mucho confeccionado por estos voluntarios a los que se ayudaba con donaciones de material, recogiéndolo de sus domicilios en los que estaban confinados y haciéndolo llegar a los centros.
También comunicando las deficiencias en los diferentes centros, colaborando en lo posible con la administración y los servicios de salud laboral, difundiendo los diferentes protocolos, cambiantes casi a diario. Haciendo un seguimiento y resumen de los datos disponibles del Ministerio mediante informes diarios, con difusión a los medios para que llegará a la población en general y a los sanitarios, incluidos médicos, en particular. La información de la evolución de datos claves es fundamental, el problema fue que los datos en demasiadas ocasiones presentaban grandes incongruencias, no eran homogéneos, cambiaron los criterios en demasiadas ocasiones y finalmente tuve que dejar de realizar los informes al no confiar en los datos que se publicaban.