Es imprescindible estimular la vocación, favorecer la adquisición de competencias y fomentar las capacidades y el profesionalismo médico a lo largo de toda la vida profesional

La profesión médica exige una actuación efectiva para que las Administraciones sanitarias activen recursos y organización en la mejora de la atención y trato al paciente terminal

La consecución de la igualdad de género en Medicina reafirma los valores deontológicos y asegura una mayor justicia social aunque para ello precisa de un fuerte compromiso de los poderes ejecutivos

Los contenidos de la política de RRHH en salud requieren una visión a medio y largo plazo, coherente y coordinada, devolviendo a los profesionales el protagonismo necesario

La FMC/DPC constituye una herramienta fundamental para el médico y un elemento primordial de garantía y seguridad en la atención a los pacientes, que ha de ser acreditado en el marco del ámbito profesional

La comunicación forma parte esencial de la profesión médica, aporta valor y debería incorporarse como una competencia fundamental en la práctica médica.

En el acto de clausura de VI Convención de la Profesión Médica, celebrada en Madrid los pasados 16 y 17 de noviembre bajo el Lema " Liderando la profesión, comprometidos con la sociedad y con los médicos", se presentaron las principales conclusiones de los temas de mayor interés y actualidad para la profesión médica que son espejo de una OMC fuerte y cohesionada y de un renovado compromiso de la corporación médica con la sociedad.


La defensa de la universalidad de la asistencia sanitaria y del SNS, las adecuadas políticas de RRHH contra la precariedad, la problemática de las agresiones a sanitarios, las políticas de género y profesión médica, la formación médica continuada, la atención sanitaria pública y privada, la docencia e investigación, la deontología y ética médica, las pseudoterapias y el compromiso social y seguridad del paciente, constituyeron la columna vertebral de esta sexta edición de la Convención.

Relación médico-paciente, patrimonio de la humanidad
 
El carácter universal e inmanente de la milenaria relación médico-paciente se enfrenta hoy a varios desafíos que se deben convertir proactivamente en retos de trasformación, dentro de una agenda renovada de profesionalismo médico.
 
El médico ha de actuar como el mejor agente del paciente, pero debe hacerlo defendiendo el pensamiento científico crítico, y el interés general de la sociedad, moderando el entusiasmo por innovaciones tecnológicas aún inmaduras y construyendo el capital de confianza en base al propio médico, a los equipos clínicos y los procesos asistenciales integrados en beneficio del paciente.
 
Todos estos elementos constituyen en sí mismos valores profesionales, culturales e inmateriales. El liderazgo de la OMC en el reconocimiento de la relación médico-paciente como Patrimonio inmaterial de la Humanidad cobra plena vigencia en éste contexto.

Pulse aquí para acceder a la nota de prensa