Más del 90% de las enfermedades minoritarias tienen origen genético y el 65% son graves, incapacitantes y complejas, según pusieron de manifiesto médicos internistas en la XI Reunión virtual de Enfermedades Minoritarias organizada por la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) y que se celebrará hasta el 30 de abril.

En palabras del coordinador del Grupo de Enfermedades Minoritarias de la SEMI, el doctor Antoni Riera-Mestre, “la medicina de precisión se perfila como una herramienta clave para su abordaje, ya que permite una medicina más personalizada, dirigida no tanto a la enfermedad sino al paciente”.
 
Las enfermedades minoritarias se caracterizan por tener una baja prevalencia en la sociedad, al afectar a menos de uno de cada 2.000 habitantes y, en España, se estima que afectan a cerca de tres millones de personas.
 
Existen más de 7.000 patologías minoritarias y se calcula que, entre el 5% y el 7% de la población, presenta alguna de ellas. El promedio de tiempo hasta el diagnóstico suele rondar los casi 5 años (en algunos casos hasta 10 años) y el 65% de este tipo de patologías son graves, incapacitantes y de elevada complejidad.

Los Dres. Fernando Lamata y Manuel Silva han sido los ponentes de la quinta mesa del VII Congreso de Deontología Médica, que ha acogido durante dos fines de semana el Colegio de Médicos de Toledo. Un debate que ha girado en torno a “La justicia distributiva y la deontología en el acceso justo a las vacunas y medicamentos para el SARS-CoV-2”.

El debate fue moderado por el Dr. Roberto Sabrido, responsable de Formación de la Fundación Colegio de Médicos de Toledo Dr. Atanasio Ballestero, quien tras saludar a los asistentes, especialmente al centenar aproximado de Latinoamérica y de Portugal, resaltó que la actual pandemia  del SARS-CoV2, “o mejor dicho la sindemia en la que nos encontramos” está haciendo aflorar con mayor crudeza graves problemas que ya teníamos y dejan al descubierto las enormes desigualdades en el acceso a los medicamentos, en este caso a las vacunas, de los ciudadanos del mundo dependiendo del nivel económico de sus países.
 
Una situación que, según el Dr. Sabrido, contraviene los tratados internacionales de derechos de los ciudadanos y se oponen a la deontología médica. Por eso, concluyó, es necesario analizar que se puede y que se debe hacer desde la profesión médica para paliar estas desigualdades.

El Congreso Nacional de Deontología Médica, que acogió la sede del Colegio de Médicos de Toledo durante los dos últimos fines de semana, abordó en su cuarta mesa: “Irrupción de la Telemedicina y la e-consulta: implicaciones asistenciales para los pacientes y los profesionales”, la trascendencia de la Telemedicina y las necesidades en este ámbito novedoso.

El objetivo de la mesa, en la que intervinieron como ponentes el Dr. Vicente Baos y el Dr. Alejandro Callizo, contó con la participación de los doctores: Ricardo Abengózar, María Teresa Vidal, Manuel Fernández, Antonio Fernández-Pro y Javier Sánchez, y fue moderado por el Dr. José Félix Sastre, era establecer qué necesitan los profesionales médicos ante esta nueva demanda, qué límites son razonables y cómo se debe regular este tipo de atención sanitaria.
 
Con ayuda de la Ética, aplicada a la deontología profesional, se deben perfilar bien las condiciones en las que el acto médico telemático se ha de realizar para que no se produzcan abusos por parte del paciente o del profesional y ninguno resulte perjudicado. Del mismo modo, alejar, en lo posible, el lucro indebido de terceros que podrían aprovechar la tecnología para conseguir unos ingresos fáciles a costa de médicos y pacientes.

El presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España (CGCOM), Tomás Cobo, asegura que el modelo asistencial actual, "universal, público y gratuito", que defiende la corporación médica, "peligra porque, desafortunadamente, el sistema no se ocupa de él con la atención que debería ocuparse”, y ha reclamado que se cuente con la profesión médica para mantener vivo este modelo de justicia social.

El presidente del CGCOM ha protagonizado hoy el Foro SER Cantabria con la exposición titulada “La Organización Médica Colegial y el Siglo XXI', en la que ha repasado la estructura y los objetivos del CGCOM, que preside desde febrero. En este foro también han participado el presidente de la Sociedad Española de Inmunología y director científico del IDIVAL, Marcos López Hoyos; el presidente de la sección de Cirugía de la Unión Europea de Médicos Especialistas (UEMS), Daniel Casanova; y el presidente del Colegio de Médicos de Cantabria, Javier Hernández de Sande.
 
El Dr. Tomás Cobo comenzó su intervención aludiendo al papel fundamental de la corporación médica en la sociedad en torno a la regulación de la profesión y a velar por el cumplimiento del Código Deontológico. “Los facultativos tenemos una obligación superior que es cumplir el Código Deontológico y que nos compromete a tener una conducta superior en tanto tenemos acceso a la intimidad física y psíquica de los pacientes. Esta tarea junto con el Registro Nacional, son las principales razones de ser de nuestra organización”, ha asegurado.

COOKIES

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación.