La figura del médico de ejercicio libre está en vías de extinción, según pusieron de manifiesto los participantes de la ponencia “S.O.S. ante la privatización del ejercicio libre de la Medicina”, celebrada en el marco de la V Convención de la Profesión Médica. Para los participantes de esta ponencia, los elementos que hacen retroceder la imagen clásica del médico de ejercicio libre en su propia consulta es principalmente la dependencia de las compañías aseguradoras, entre otros. Ante esta situación y para evitar la desaparición del ejercicio libre solicitaron que los Colegios de Médicos y la OMC se impliquen más en la defensa de este profesional médico.

En esta ponencia, que estuvo coordinada por la Dra. Carmen Fernández Martínez-Septien, secretaria general del Colegio de Médicos de Burgos y moderada por el Dr. Juan Bautista Alcañiz Folch, presidente del Colegio de Médicos de Sevilla, participaron como ponentes el Dr. Manuel Carmona Calderón, representante Nacional Medicina Privada por cuenta propia de la Organización Médica Colegial (OMC); y el Dr. Alfonso Carmona Martínez, vicepresidente del Colegio de Médicos de Sevilla; y como preguntadores actuaron los doctores Emilio García de la Torre, presidente del Colegio de Médicos de Jaén; y Luis Rodríguez Padial, presidente del Colegio de Médicos de Toledo. El autor del abstract fue el Dr. Francisco Kovacs Reus, director de la Red Española de Investigadores en Dolencias de la Espalda y Unidad de la Espalda Kovacs del Hospital Universitario Moncloa, de Madrid.

La imagen clásica del médico de ejercicio libre en su propia consulta, está en retroceso debido a que esa relación directa de médico-paciente depende ahora de terceros y cuartos como son las compañías aseguradoras que marcan los honorarios al límite de cubrir costes. Asimismo, se debe a la necesidad de tecnología cada vez más cara en algunas especialidades, las dificultades burocráticas y elevados costes de apertura y mantenimiento de las consultas; sumado a una escasa o nula formación empresarial del médico.

“El ejercicio libre de la Medicina es una parte pequeña de la Medicina Privada, es un médico autónomo que atiende a un paciente que ha sido elegido por él y donde la relación entre ambos se rige por la máxima de confianza”, explicó el Dr. Manuel Carmona Calderón durante su intervención.

El problema aquí viene –según dijo- en que este profesional ahora es un asalariado o falso autónomo dependiente de las compañías aseguradoras que son las que disponen de un cuadro médico propio y las que negocian y ejercen de terceros entre médicos y pacientes. “Imponen sus condiciones y criterios económicos y sólo se preocupan por el paciente como cliente, cobrándole un importe mayor que lo que el paciente debería pagar al médico por su ejercicio”, señaló el representante nacional de la OMC quien reivindicó que “las aseguradoras privadas exprimen a los médicos de ejercicio libre”.

El futuro boyante de la Sanidad Privada inmerso en grandes inversiones y cuadros médicos propios de las aseguradoras, lleva para el Dr. Carmona Calderón “a la extinción del profesional autónomo”. Algo para lo que el experto pidió “unión de los profesionales”, como medida para defender los intereses de la profesión. “Si nos unimos –afirmó- podemos hacer algo para cambiar esta realidad”.

En la misma línea, el Dr. Alfonso Carmona Martínez, hizo hincapié en que “el médico, que es eje de desarrollo de toda la Medicina, ha pasado poco a poco a un segundo plano” y añadió que “las mutuas aparecen para sacar sustento y aprovecharse”.

La relación médico-paciente ha pasado, para el Dr. Carmona Martínez, a una relación de terceros. “Ahora –aseguró- entre el médico y el paciente existen grupos hospitalarios que negocian con la compañía aseguradora sobre cuanto cobrar al paciente y cuanto pagarte a ti como médico”.

“Tenemos un Sanidad Pública y Privada buena”, según aludió el Dr. Carmona Martínez, “pero hay que gestionarlas bien, con los recursos que disponemos y haciendo al médico partícipe de esta gestión”, apuntó el vicepresidente del Colegio de Médicos de Sevilla, quien manifestó que ya no existe una Medicina privada, sino una Medicina concertada “donde los médicos somos los artistas invitados de un escenario donde las aseguradoras y hospitales trabajan al margen e imponen sus baremos y condiciones”.

Por este motivo se preguntó “si los médicos queremos seguir siendo menos valorados en la Medicina Pública y Privada” y como solución a este problema sugirió que se aglutinen todas las reivindicaciones del médico, “porque un médico individual no hace nada. Necesita del apoyo de su Colegio y de la OMC, para que defiendan nuestras necesidades”. Y, poniendo el foco de actuación en las compañías aseguradoras y de los grupos hospitalarios, “salgamos junto a la OMC a la calle a reivindicar y dignifiquemos juntos la profesión y exijamos el reconocimiento del médico”.

Para el Dr. Carmona Martínez, “si somos capaces de cambiar el concepto que tienen los médicos de sus Colegios, y si los profesionales nos unimos en un esfuerzo común, conseguiremos hacer una Sanidad mejor, con un médico que vuelva a ser el eje del sistema para que el paciente, nuestro fin último, reciba la mejor asistencia”.

Sanidad concertada y control de calidad del ejercicio médico

Tras exponer la situación actual de los médicos en España donde muchos tienen que emigrar en busca de trabajo a otros países, el Dr. Emilio García de la Torre puso sobre la mesa si la solución a este problema sería que la administración dejara de poner trabas para abrir consultas privadas y empezara a reconocerse la complementariedad del sistema público y privado y la concertación entre las dos, algo en lo que ambos ponentes coincidieron en que hay que aprovechar todos los recursos para facilitar un modelo de concertación.

El control de la calidad de los actos médico, tanto en la Medicina Privada como Pública fue un tema por el que mostró preocupación el Dr. Luis Rodríguez Padial. Los dos doctores Carmona insistieron en que el médico siempre garantiza la calidad de sus actos que quedan reflejados en el informe que trasladan al paciente con las pruebas que se han hecho.

Las conclusiones que se obtuvieron de esta ponencia pasan por evitar la desaparición del ejercicio libre con la unión de los profesionales y una mayor implicación de los Colegios de Médicos y de la OMC en la defensa del profesional médico para apoyarle en la relación asimétrica que mantiene con las compañías aseguradoras.  

Asimismo, hubo un alto grado de consenso para que se promueva una norma marco para que en los centros y servicios sanitarios privados sea obligatoria la existencia y funcionamiento de un órgano profesional asistencial independiente.

En una situación de deterioro progresivo de la profesión, en el sector privado, por la aparición de grandes grupos aseguradores de salud y de grandes grupos hospitalarios, se consideró que el médico no logra defenderse como profesional por la diversidad de intereses y situaciones entre especialidades y profesionales, por el individualismo histórico y la falta de cultura de asociación.

Finalmente, expusieron que el principal obstáculo para que los médicos jóvenes puedan optar por el ejercicio privado de la medicina se debe a la pérdida de retribución económica por persistencia del complemento de exclusividad en algunas Comunidades Autónomas, a la escasa retribución económica por parte de las compañías aseguradoras, a una jornada laboral, extensa y poco flexible, que dificultad la conciliación de la vida familiar y laboral y una inversión económica a realizar para iniciar la actividad privada y la exigencia tecnológica que conlleva establecer una consulta en solitario.