En estos momentos difíciles, posiblemente los más difíciles de la historia vital de la gran mayoría de los españoles, es necesario seguir manteniendo un mensaje de confianza, de serenidad y de prudencia. No es fácil para nadie, y especialmente para las profesiones sanitarias en general y para la profesión médica en particular. Miles de médicos y médicas en todo el país están dando todo lo mejor de sí. Están llevando al límite su compromiso social, ese dar todo, para todos y por encima de los propios intereses personales. Competencia, tiempo, vocación, sacrificio, merecen el máximo reconocimiento. Por eso queremos enviar el mensaje tranquilizador a los ciudadanos de que siempre vamos a estar con ellos y, por lo tanto, seguiremos siendo firmes en centrar nuestras peticiones y aportaciones a la realidad de hoy. La profesión médica demanda ya medidas urgentes, eficaces, efectivas y eficientes. Estas medidas no tienen que ver con lo que pudimos hacer y no hicimos y lo que tendremos que hacer en un futuro. No entiende de debates políticos y si de compromisos y de aunar esfuerzos todos juntos. Somos un gran país y es por lo que demandamos:
- Ni un día más sin el obligado material de protección. El personal sanitario debe contar con equipos de protección individual (EPI) y someterse a la realización de los “test “de forma periódica e inmediata independientemente de los síntomas o la exposición a casos sospechosos o confirmados. Los miles de profesionales sanitarios que están trabajando arduamente para contener la propagación del virus se merecen respeto y seguridad. A pesar de los esfuerzos sin precedentes para detener la pandemia, los profesionales de la salud están en primera línea sin los EPIs adecuados. Actualmente España soporta el triste récord de estar en el 15% de profesionales infectados y esta semana hemos asistido con dolor y rabia a los primeros fallecimientos por esta infección. Incluso en tiempos de crisis, deben garantizarse las condiciones de trabajo adecuadas. El personal debe tener descansos y tiempo libre entre turnos para poder continuar un día más hasta la resolución de esta crisis global sin precedentes. Trabajar en estas condiciones afecta a la salud psicológica de los profesionales, por lo que debe considerarse establecer los servicios de apoyo necesarios. La red PAIME (Programa de Atención Integral al Médico Enfermo) debe ser reconocida como de especial utilidad.