Un informe de la Oficina Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha resaltado los beneficios para la salud, tanto mental como física, de varias actividades culturales, como el teatro, la música, el canto, los museos la pintura o la lectura

Este estudio ha analizado las pruebas de más de 900 publicaciones científicas a nivel mundial, lo que supone la revisión más exhaustiva de las pruebas sobre arte y salud hasta la fecha. Así, el informe revisa las actividades artísticas que buscan promover la salud y prevenir la mala salud, así como manejar y tratar las enfermedades físicas y mentales y apoyar la atención sanitaria y social al final de la vida.

La OMS destaca que desde antes del nacimiento hasta el final de la vida, las artes pueden influir positivamente en la salud. "Por ejemplo, los niños pequeños cuyos padres les leen antes de ir a la cama duermen más tiempo por la noche y se concentran mejor en la escuela. Entre los adolescentes que viven en zonas urbanas, el teatro puede apoyar la toma de decisiones responsables, mejorar el bienestar y reducir la exposición a la violencia. La música también puede apoyar la cognición en personas con demencia. El canto, en particular, mejora la atención, la memoria episódica y la función ejecutiva", resumen.


"Llevar el arte a la vida de la gente a través de actividades como bailar, cantar, ir a museos y conciertos ofrece una dimensión adicional sobre cómo podemos mejorar la salud física y mental. Los ejemplos citados en este innovador informe muestran las formas en que las artes pueden abordar complejos problemas de salud como la diabetes, la obesidad y la mala salud mental", detalla el director regional de la OMS para Europa, Piroska Östlin.

En los entornos de atención sanitaria, la OMS señala que las actividades artísticas pueden utilizarse para complementar o mejorar los protocolos de tratamiento. Por ejemplo, indican que escuchar música o hacer arte reduce los efectos secundarios del tratamiento contra el cáncer, incluyendo somnolencia, falta de apetito, falta de aliento y náuseas. Además, la música o los payasos reducen la ansiedad, el dolor y la presión arterial en situaciones de urgencia.

En el mismo sentido, el baile proporciona mejoras clínicamente significativas en las puntuaciones motoras para las personas con la enfermedad de Parkinson, según la OMS. El informe destaca que algunas intervenciones artísticas no solo producen buenos resultados, sino que también pueden ser más rentables que los tratamientos biomédicos más comunes.

"Pueden combinar múltiples factores de promoción de la salud a la vez (como la actividad física y el apoyo a la salud mental) y tienen un bajo riesgo de resultados negativos. Dado que las intervenciones artísticas pueden adaptarse para que tengan relevancia para personas de diferentes orígenes culturales, también pueden ofrecer una vía para involucrar a grupos minoritarios o de difícil acceso", justifica la OMS.

FUENTE: medicosypacientes.com