Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han relacionado las alteraciones en la microbiota intestinal, formada por bacterias que habitan en el intestino, con la miastenia grave, una enfermedad neuromuscular que se caracteriza por debilidad en los músculos

Según informó este miércoles el CSIC, en la miastenia grave se ve afectada la comunicación neuromuscular. Está causada por la presencia de anticuerpos que atacan las proteínas involucradas en la sinapsis neuromuscular, es decir, la unión entre una neurona y una fibra muscular.
 
Los resultados obtenidos en este estudio, publicado en la revista ‘Scientific Reports’, han demostrado una alteración de la microbiota intestinal en pacientes con esta patología, que presentan niveles más elevados de bacterias Gram-negativas y menores niveles de otros microorganismos, como las ‘bifidobacterias’, que individuos de control sanos.


El investigador del CSIC Miguel Gueimonde, del Instituto de Productos Lácteos de Asturias, explicó que “sabemos que la microbiota intestinal, además de digerir los alimentos, ayuda a nuestro sistema de defensa frente a las enfermedades e, incluso, interfiere también en el desarrollo neurológico. En relación al conocimiento sobre las alteraciones de la microbiota en otras enfermedades autoinmunes, los resultados de este estudio extienden estas observaciones a las enfermedades neuromusculares autoinmunes”.
 
“Se trata de un estudio previo, pero, de confirmarse el papel de la microbiota en esta enfermedad, sería posible desarrollar estrategias para complementar el tratamiento de los pacientes con productos capaces de modular o cambiar su microbiota intestinal de un modo beneficioso”, agregó Gueimonde.

FUENTE: medicosypacientes.com
 


COOKIES

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación.